Ser a dif cil separar a la literatura oscura y de horror del papel que el Romanticismo tuvo en su surgimiento, auge y consolidaci n. Uniendo los precedentes de la novela g tica, las baladas sobrenaturales y la poes a de cementerio, numerosos autores rom nticos se abocar an a cimentar el g nero del cuento de horror, cuyos ecos llegan hasta el presente, as como a incursionar en un tipo de escritura que no tardar a en dar lugar a la poes a en prosa y a escuelas est ticas como las del simbolismo y el decadentismo. Este volumen, que cierra la trilog a de esta editorial sobre literatura oscura, nos presenta diversos hitos de la sombr a prosa de ese per odo. La obra se inicia a fines del siglo XVIII con el fragmento Sir Bertrand, de John Aikin, que nos ofrece un perfecto ejemplo de las diversas caracter sticas de la novela g tica prerrom ntica, y con una de las Noches l gubres, de Jos Cadalso, herederas directas de la poes a de cementerio. Ya en el siglo rom ntico, nos asomamos a algunas de las m s tempranas incursiones en el cuento corto de horror de la mano del franc s Charles Nodier, autor de la antolog a Infernaliana, el alem n E. T. A. Hoffmann, con Una historia de fantasmas, y el estadounidense Washington Irving, con La aventura del estudiante alem n. La r pida evoluci n del g nero empieza a quedar manifiesta en obras como El joven Goodman Brown, de Nathaniel Hawthorne, Morella, de Edgar Allan Poe, Viy, del ucraniano Nikolai Gogol, La familia del vurdalak, en la que el ruso Aleksei K. Tolstoi nos presenta a los vampiros eslavos, y muchas de las Leyendas del espa ol Gustavo Adolfo B cquer, en las que se condensa toda la oscuridad del Romanticismo tard o. Uno de los primeros herederos de toda esta literatura es sin duda Charles Baudelaire, que populariza el g nero de los poemas en prosa y resulta as una influencia insoslayable para el espeluznante surrealismo de Los cantos de Maldoror, del Conde de Lautr amont. La huella que la est tica rom ntica deja en todo el subsiguiente g nero de horror se vuelve f cilmente identificable en los relatos de Kwaidan, de Lafcadio Hearn, y tambi n en muchas de las m s alucinadas p ginas de Guy de Maupassant, uno de cuyos ejemplos es su cl sico El horl . El presente viaje culmina con la aparici n, a fines del siglo XIX, de la escuela decadentista, cuya oscuridad y morbidez pueden apreciarse tanto en diversos fragmentos de la novela All lejos, de Joris-Karl Huysmans, como en el drama Salom , de Oscar Wilde.
ThriftBooks sells millions of used books at the lowest everyday prices. We personally assess every book's quality and offer rare, out-of-print treasures. We deliver the joy of reading in recyclable packaging with free standard shipping on US orders over $15. ThriftBooks.com. Read more. Spend less.