Bajo el t tulo La aventura del Amazonas se public una antolog a que comprende este texto de Gaspar de Carvajal juntos a otros documentos escritos por otros conquistadores. La presente edici n incluye solo la cr nica de Carvajal. En Linkgua hemos publicado una antolog a, independiente de esta, con el t tulo de Descubrimiento del r o de las Amazonas. Esta contiene las cr nicas de otros participantes en la expedici n.
En diciembre de 1541, el capit n Francisco de Orellana, con medio centenar de hombres y el fraile dominico Gaspar de Carvajal, abandon el campamento de Gonzalo Pizarro para buscar alimentos. Alcanzaron la confluencia del Napo y el Trinidad, pero no encontraron provisiones. Sin poder volver atr s por la fuerza de la corriente, decidieron seguir r o abajo, hasta llegar a la desembocadura del Amazonas.
Orellana y sus hombres se vieron, con escasos medios f sicos. As recorriendo el gran r o hoy llamado Amazonas y realizando la primera navegaci n completa de su curso, desde los Andes ecuatorianos hasta el mar Atl ntico. El 11 de septiembre del siguiente a o, 1542, se puso fin a esta odisea mar tima con el desembarco, en la isla de Cubagua (Nueva C diz).
Francisco de Orellana tras sobrevivir a la traves a del viaje por la Amazonia, regres a Espa a y fue acusado de traici n por Gonzalo Pizarro.
Gaspar de Carvajal, dej escrita la relaci n de dicho viaje. Aqu en todo momento pone especial cuidado en dejar clara la inocencia de Orellana, restableciendo la honra y resguardando la fama de su capit n.
Los datos de la expedici n, registrados por fray Gaspar de Carvajal proporcionan informaci n de gran inter s etnol gico. Describen
la disposici n y tama o de los poblados,
ocupaci n continua a lo largo de las barrancas del r o,
caminos amplios que comunican el r o Amazonas con la tierra firme,
t cticas de guerra,
rituales,
costumbres
y utensilios abor genes.
A su regreso al Per , Carvajal fue elegido subprior del convento de San Rosario en Lima. En este puesto, fue elegido para arbitrar entre el virrey, y los auditores de la Real Audiencia en 1554. Despu s de la pacificaci n del Per , fue enviado por sus superiores como misionero a Tucum n, siendo nombrado protector de los indios.
La presente edici n de La aventura del Amazonas contiene notas de Luis Augusto Cuervo.